La remota posibilidad

Sí, soy yo otra vez señora, el mismo de la semana pasada, con el que discutió tanto. No, no se vaya, espere, por favor, le pido unos minutos nada más, sólo unos minutos. Gracias.

Es que me quedé pensando en eso que me dijo entonces, que los periodistas que hablan a favor del gobierno, están todos comprados. Sabe una cosa, estuve pensando lo siguiente, por lo que le pregunto:

Si un periodista puede ser comprado por un gobierno ¿Entonces quiere decir que por dinero o por otras presiones puede faltar a la verdad no? ¿Por lo que podemos concluir entonces que existe la posibilidad cierta que no todos los periodistas traten de reflejar los hechos como se dan, cierto? ¿Así que si seguimos este razonamiento cabría la posibilidad que también los periodistas que hablan en contra del gobierno estén pagos o sometidos a diversas presiones, no señora? O simplemente no tengan la suficiente hombría y por sentirse cómodos y contenidos, reproducen el discurso dominante de las empresas de medios ¿No?. Porque digo, si un periodista puede falsear la información porque el gobierno le paga, también lo puede hacer un periodista porque su jefe, el dueño del diario o del canal, así se lo exige ¿O no? ¿O es que existe la divina posibilidad que el periodista que trabaja a sueldo de un patrón sea incorruptible?

Sabe por que le digo esto, para que vea si cabe la remota posibilidad de que allá y hace tiempo, cuando las Corporaciones Periodísticas fueron advertidas que este gobierno de turno avanzaría con una Ley que perjudicase sus negocios, sus ganancias en definitiva legítimas (o no), no se agazaparían para en la primer oportunidad tratar de derribarlo.

Por que luego, a los meses nomás, la famosa 125 pareciera haber sido esa esperada oportunidad, oportunidad esperada también por sus socios de los agronegocios para volver al estado pequeño, enano, ese de los ’90 que les hizo el favor de introducir la soja RR sin la mínima evaluación y no controlaba su mercado.

Mire, le traje este artículo que escribió un amigo, Marmaduke. Léalo por favor. ¿No le parece demasiada coincidencia? ¿No le parece también demasiada coincidencia que el empresariado nacional comience a renegar de este modelo que privilegia a los trabajadores por sobre sus ganancias en un escenario de crisis económica mundial? ¿Y no le parece coincidencia también que la cúpula eclesiástica los apoye, al igual que hicieron con los militares que ahora son juzgados?

No señora, espere, no me sierre la puerta en la cara señora, no, espere ¡¡¡Por favor!!!! ¡¡¡Señora!!!
¿No cabe la remota posibilidad?

Parece que no.