La observación que vengo haciendo entre gente desprevenida y que lo vio todo por TN (no ven otra cosa) resulta netamente favorable para Cristina. Fue tan burda la maniobra que hasta los mas desprevenidos lo notaron. Observesé que lo unico que les quedó para seguir revolviendo, es el asunto de La Matanza (aguda ironia de la Presi que sabe que eso les dolía mas que una patada en el culo a esos pendejitos que se las daban de sobradores). Los únicos boludos que estamos discutiendo el asunto y entrando en el juego de ellos somos nosotros, que estamos permitiendo que esto desdibuje la "parada de carro" de Cristina al FMI y a Lagarde.
Me parece que nosotros mismos nos estamos pasando de rosca.
Tambien hay mucha gente desprevenida a la que se le reveló algo, y ahora se preguntan "¿Y este es el famoso Harvard?". Cosa que si la decimos nosotros nos descalifican, pero ahora les quedó en claro, y van a tener que remar mucho y mentir mucho mas para revertir el tiro por la culata que les salió.
Hay por alli algun cumpa que formuló la pregunta: ¿Angela Merkel, Obama o Rajoy se animarían a algo similar en cualquier Universidad Publica Argentina?Hay quienes cuestionan la oportunidad de haber concurrido Cristina a Harvard y la inconveniencia de haberla expuesto a preguntas por parte de los "estudiantes" de un lugar que de acuerdo a nuestra triste experiencia es a los sectores gubernamentales de la derecha latinoamericana, el equivalente o el complemento indispensable de la tristemente celebre Escuela de las Américas, a las Fuerzas Armadas.De Harvard salían los administradores del las politicas económicas para las que las FFAA "disciplinaban" según dijera Videla a Reato.
Cristina fue alli, como va a cualquier lugar donde pueda trasmitir al mundo como se ven las cosas desde un país remoto que pasó por el infierno y va encontrando el camino de vuelta.
Se ven obligados a armar todo este argumento para ocultar la impecable exposición en la Asamblea de la ONU y en todo cuanto foro se le puso al alcance. La clarísima caracterización de la crisis internacional como de crisis política y económica mas que financiera ante la falta de salidas a los problemas de la Eurozona, el recordar que los totalitarismos fueron hijos de la falta de alternativas políticas a la codicia de los grandes intereses mas que por cuestiones de otra índole marcan una sensible diferencia con el resto de los mandatarios alli presentes (con la sola excepción de Dilma Rouseff). Esto es lo que tenemos entre manos y no una pedorra discusión sobre La Matanza. Creo que ya es momento en que dejemos que nos impongan una agenda extraña y que dejemos de correr detrás de los acontecimientos. Que dejemos de gastar pólvora en chimangos y recordemos que nuestras batallas no se dan con cacerolas, sino con urnas, y que llenarlas de votos es tarea nuestra, no solo de Cristina






























