Una semana muy ajetreada y desconcertante

Lo sintetizó muy bien uno de los tantos comentarios de lectores de La Nacion On Line: ¡Por favor, expliquenmé que pasó, que ganamos pero ellos sacaron mas bancas que nosotros!

Las mentiras tienen las patas cada vez mas cortas, y suelen ser contraproducentes.

El domingo pasado a estas horas (18.30) todos estábamos a la expectativa de lo que se iba a revelar en unas horas mas. Nada que nos sorprendiera. Sabíamos que el FPV seria derrotado por el FR, compuesto por el pejotismo mas tradicional y el PRO.

Lo que si fue sorprendente que el Frente Renovador durara menos de 24 horas, con la hégira de tres Diputados electos al PRO.

Cuando se terminaron de contar los votos hubo mas sorpresas, porque aplicados esos votos al reparto de las bancas en juego resultó que el FPV (que segun parecia había perdido) tenía cinco bancas mas de diputados que antes, y que no solo eso síno que habia recuperado un millon y medio de votos con respecto al resultado de las PASO.

Cuando empezamos a hacer comparaciones, nos encontramos con otra sorpresa. Comparando eleccion Legislativa con Eleccion Legislativa como vemos en el cuadro que se acompaña (o sea 2009 con 2013) vemos tambien un incremento de los votos al FPV en los totales nacionales, y tambien se puede observar un mayor fraccionamiento de las demás opciones electorales, que casi en un juego de "suma cero" han intercambiado entre si sus votantes.

De alli que sea comprensible el desconcierto del lector de La Nación.
¿Resultado? El delirio de algunos que pensaban en una reedición del "Grupo A" del 2009 con mayor potencia para poder imponer un opositor (¿Massa?) en la línea de sucesión Presidencial e impulsar un juicio político para destituír a las autoridades nacionales elegidas con el 55% de los votos solo dos años atrás, se fue por una de esas canaletas a las que es tan afecto el Senador Sanz.

Un par de días después, cuando recién estábamos todos analizando los resultados y tratando de interpretarlos, la Corte Suprema de Justicia de la Nación, cerró el capítulo del culebrón de la Ley de Servicios Audiovisuales declarando su Constitucionalidad.

No califico para opinar sobre los considerandos y disposiciones del fallo. Hay sobrados amigos con los conocimientos suficientes para opinar, así que prudentemente me voy a abstener de hablar al cuete.

Pero eso desató la histérica reacción de quienes ven sus intereses afectados, al punto que un grupete de periodistas se trasladó (con el dinero que aportamos nosotros a sus medios cada vez que compramos algún producto que forme parte de su pauta publicitaria) a exponer ante la CIDH de la OEA sobre los peligros que estaban corriendo. Alli los atendieron, casi "de parado" por decirlo en criollo, y no solo eso, sino que de yapa, salieron en la OEA ponderando las virtudes de nuestra Ley. Bueno, al menos consiguieron una nota del "Washington Post", (que dicho sea de paso, en su composición societaria, comparte inversores con el Grupo Clarín, información esta que nos proveyera Jorge Lanata hace ya un tiempo) criticando duramente la Ley de Servicios Audiovisuales. Vale la pena recordar aqui que en los EEUU, la Ley prohibe expresamente a los propietarios de algun tipo de medio, tener propiedad o inversión en otro tipo de medio. Simplificando, el que es dueño de un diario no puede ser dueño de una radio o canal de TV y viceversa.

¡OJO! que la cosa no va a terminar mágicamente aqui. Solo hemos entrado en otra fase del conflicto. De la batalla a campo abierto, pasamos a la lucha en poblado, y la defensa será casa por casa. El oligopolio defenderá con uñas y dientes todas y cada una de sus posesiones, y llevará mucho tiempo desbrozar el camino hacia una comunicación mas igualitaria.

Pero hay otro factor a tener en cuenta, y que es que el Grupo ha perdido poder económico, y sus inversores están preocupados. Cuando escribí aca sobre los estrategas chambones también me estaba refiriendo a eso. Y los inversores y el capital generalmente son mucho mas crueles que el AFSCA aplicando la Ley.