jueves, 20 de noviembre de 2014

La "Alternancia" ¿una virtud teologal de la Democracia?

Últimamente han empezado a aparecer por ahi por las redes sociales, algunos intelectuales y librepensadores que nos empiezan a advertir de la falta de una de las virtudes en esta democracia tan joven y poco experimentada como la nuestra, que viene a ser la "alternancia". Según ellos seremos una democracia virtuosa cuando incorporemos la alternancia en el poder.

Pero lo pregonan en abstracto, y a uno se le despierta la curiosidad sobre que será la tan virtuosa alternancia.

¿Será acaso una alternancia de Partidos? ¿O será una alternancia de proyectos de país?

Ateniéndome a la Historia, y a mi propia experiencia de vida, la tan mentada "alternancia" es tan vieja como nuestra existencia como país. Hemos alternado entre dos modelos; el de un país agroexportador, y un país integrador armónico de sus componentes. En nuestra historia del siglo XX esa alternancia se dio a partir de la Ley Saenz Peña, y la consecuente aparición del Radicalismo, con Yrigoyen a la cabeza, y aqui comenzó la "alternancia". Curiosamente la alternancia no se dio por el voto del pueblo, si no por un Golpe de Estado, y la proscripcion electoral del Radicalismo. Levantada la proscripción, para cuidar la "alternancia" inventaron la "Concordancia", un mix electoral donde Radicales Antipersonalistas (los antepasados de Aguad, Cobos, Sanz, Morales de hoy) y Conservadores pergeñaron una alternancia sostenida por el fraude.

Y despues llegó el pueblo... Que cuando pudo expresarse libremente, eligió a Perón, que retomó el modelo de país que Yrigoyen había iniciado.

Otra vez la burra al trigo, en honor a la falta de "alternancia" ya que el pueblo insistía tozudamente en votar a quien encarnaba ese proyecto nacional, así fue que para fomentar la alternancia, vino la "Revolución Libertadora" que para asegurar la alternancia, proscribió al Peronismo, así como Uriburu y Justo habían proscripto al Radicalismo 25 años atrás.

Y claro el pueblo, que no se anda gastando en teorizaciónes ni en presuntas "virtudes" de la democracia de laboratorio, persistió en sus mala costumbre de pretender decidir por sí mismo su camino. Hubo de venir el "Proceso" para poner un poco de orden en este desquicio. "Disciplinar al pueblo argentino, e imponer una economía liberal" como declarara Videla a Ceferino Reato (ver acá).

Hubo si, una época de feliz funcionamiento de la alternancia; Menem, De la Rúa: con una politica económica común manejada por los mismos personajes, de ellos el mas notorio, Domingo Felipe Cavallo, ministro de Economía de ambos. Así quedamos....

Si por "alternancia" en abstracto, me quieren vender ese tipo de "alternancia" concreta, donde se aplican las mismas recetas económicas, sin importar para nada el partido que gobierne, que quiere que le diga Coronel, como diríamos en Mayol "no se que gracia le encuentran a eso..."

La alternancia  la va a decidir el Pueblo Argenitno cuando se le cante o lo crea necesario, sin necesidad de que lo anden tutelando.

Antonio (el Mayolero)

4 comentarios:

Nos Disparan desde el Campanario dijo...

De algo estamos seguros. Ninguno de nuestros republicanitos, honestistas y denuncistas, estando en el poder, verían salubre una alternancia a favor de un proyecto populista. Esto de la alternancia me suena a aquel viejo artículo titulado Gobierno de Turno.

http://lasbalasdelcampanario.blogspot.com.ar/2013/05/gobierno-de-turno.html

Politico Aficionado dijo...

Lo que es claro es que la alternancia entre proyectos incompatibles es un disparate.

ram dijo...

Lo que yo sospecho es que la alternancia más virtuosa entre las que no qieren vender, es aquella referida a los piringundines, donde la clientela "alterna" con las chicas del lugar.... claro, que si uno imagina a la stolbizer, carrió o la bullrich empilchadas y en plena tarea, más bien huye despavorido; ni le cuento si los que "alternan" son los chicos sanz, hermes, ricardito o moralito: estampida segura...
Por supuesto, uno es poco moderno, atrasado y populista incorregible que no entiende tanta pero tanta cosa buena que nos recomiendan, no somos nada, claro...

Mariano T. dijo...

A mi me gusta la alternancia, pero es el pueblo el que decide.

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