Parece que la jornada de ski del Príncipe grande o la desconfianza al plan de austeridad son un poco más importantes.
La escasa fortaleza del argumento de "autodeterminación de los pueblos" que tanto esgrime el gobierno británico, se fundaba en la identidad autoproclamada de los isleños británicos como "falklanders", protejidos por la reina. Una onda Canadá o Australia. Pero ante la desesperación del nulo apoyo internacional (ni el gobierno de USA reconoce los comicios), los votantes no tienen el más mínimo prurito en mostrarse entonces como británicos de pura cepa, festejando vaya uno a saber que victoria, que salvo la de mantener la usurpación, no hacen más que demostrar cuán nada tiene que ver la población que allí habita con las islas. Puros colonizadores.
Esta muestra de desesperación está acompañada de un dato singular, los dos días para que voten poco más de mil personas. Sin dudas el impacto mediático del asunto es una de las principales apuestas, como suele suceder con los gobiernos en crisis profundas como el de Cameron.
Tal vez la presencia del legislador uruguayo Jaime Trobo como observador de para un post, pero no es para tanto, cipayos y pitiyanquis los hubo, los hay y los habrá siempre. Raro que no estuviera Fernando Iglesias.
1 comentario:
¿Qué cuenta la boca de urna de Lanata?. ¿No hace un programa especial desde la Islas?
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