Por FrancoMediador
Estamos haciendo escuela. Y secuela.
La presidenta compañera Cristina se compara con Dorrego, y solita se pone contra un paredón para que le peguen todos los pelotonazos que solo “acatan ordenes” de los Lavalles dueños de diarios.
La presidenta compañera Cristina se compara con Dorrego, y solita se pone contra un paredón para que le peguen todos los pelotonazos que solo “acatan ordenes” de los Lavalles dueños de diarios.
Después otros salen a defenderla, y los aliados y los enemigos se ponen a biografiar a Manuel el Coronel para ver hasta dónde se parece.
Dicen los pelotonazos: "Dorrego nunca usó carteras de más de diezmil dolares" "Desmienten que Cristina se haya burlado de Belgrano antes de la batalla".
Los oficialistas desmienten "Cristina se fue a Estados Unidos, pero no exiliada", "Buzzi es un piquete sin cabeza".
Lo último fue la levantada de la radio compañera que, con la excusa de una enrevista nos pone en imagen en su blog. Se retribuirá (y redistribuirá) la gentileza.
Ya hoy, y en notable escalada verborrágica, el compañero ministro Frenández dice que lo que los medios clarineros hacen con la ministra ... es un "fusilamiento mediático". De boca en boca el blog se ha hecho su espacio, y por eso proponemos, sin que nos tiemble el pulso, que a Manuel el Coronel se lo ascienda a General.
1 comentario:
Ojalá Lavalle hubiera sido, al menos, dueño de un diario. Pero el pobre don Juan era un reverendo pelotudo (la espada sin cabeza, el cóndor ciego) al que usaron para hacerlo matar a Dorrego. Y encima, el pobre imbécil tomó para sí toda la responsabilidad.
Lavalle no era un Magneto, era apenas un senador radical.
Marcelo
Publicar un comentario