"....Hay algunas cosas a tener en cuenta a mi entender. El Vaticano es un jugador de primera en la política mundial. Pretender minimizar su peso e influencia en las grandes decisiones sería pecar de ingenuos. Pretender que el Gobierno Argentino se enfrente a Francisco por el pasado de Jorge Bergoglio es un acto temerario. A priori entiendo que hay que manejarse con la mayor prudencia, y tambien entiendo que Cristina y su equipo de RREE han dado sobradas muestras de inteligencia, astucia y sagacidad como para tener dudas de que en este caso no vayan a proceder con su habitual y probada idoneidad. Ya tienen suficientes partidos en ligas internacionales como para que no los asuste el desafío...."
El 22 de noviembre, en mi muro de facebook:
Yo hace una semana dije que Bergoglio le había pedido a Cristina que lo designara a Moreno en Roma porque lo necesitaba para luchar contra la mafia del Vaticano y los chanchullos del IOR
Ha ido pasando el tiempo y algunas cosas parecen olvidarse en el fárrago de la información diaria. El Poder, el Estado y la Iglesia son fuerzas que interactúan en la sociedad desde siempre. Desde el Obispo Lué en las asambleas previas a la Revolución de Mayo abogando en favor de la superioridad Española al Sacerdote Manuel Alberti integrante de la Primera Junta, dentro de la Iglesia existieron posiciones disimiles que jugaron en uno u otro sentido según las circunstancias que se vivieran en cada momento histórico. Alla por 2010 escribí aca el primer de tres posteos sobre el devenir de la Ley 1420 donde explico (lo mejor que puedo) estas idas y vueltas sobre la relación de la Iglesia y el Estado en un tema tan sensible como lo es la Educación.
Mas adelante en el tiempo, las idas y vueltas de la relación de la Iglesia con Perón, desde 1946 a 1955 son una buena muestra de estos tironeos; tanto como la disimil posición de la Iglesia en tiempos mas actuales, donde coexistieron en la jerarquia vernácula Monss. De Nevares, Novak, Angelelli, Ponce de León o Hesayne por mencionar algunos, como Monss. Plaza, Bonamín y otros similares.
Algunos nostálgicos del papel protagónico del Cardenal Copello y la Iglesia en el golpe de 1955 creyeron ver en la entronización de Jorge Bergoglio como Papa Francisco la maradoniana "mano de Dios" que iba a ayudarles a conseguir lo que las urnas les niegan. Pero son otras circunstancias históricas. Ya la Iglesia no tiene el peso social que tenía entonces, y si algun peso tiene, es el conseguido por los curitas de base, esos que con el barro hasta los tobillos, chapotean por lugares lejanos de la llamada "civilización", ya sea por las villas de la CABA o el conurbano, o en El Impenetrable. Y necesariamente Jorge, ahora en su papel de Francisco, debe contar con ellos en el batallar de la Iglesia con Evangélicos, y sectas diversas de predicadores electrónicos que le van capturando los fieles que con las Jerarquias conservadoras supieron extraviar.
Dentro de todo esto aparece Cristina piloteando una situación; "cambiando la bocha" y dejando mas a contrapierna aún a una oposición que sin terminar de digerir el resultado electoral, el fallo de la CSJN sobre la Ley de medios Audiovisuales, el arreglo con Repsol, y la muy cercana solución del problema de los fondos buitre, (que ya se están cansando de esperar las promesas de sus lenguaraces y comisionistas locales, que hace varios años les vienen asegurando que "en un par de meses el gobierno cae, y entonces cobramos todos") andan viendo como encontrar la forma de recuperar algo aunque sea.
Entonces sale Duhalde desde el fondo de la historia, ponderando a Capitanich, y descubrimos la existencia de uno de esos curitas a los que ya aludí, con sobrada experiencia en el trabajo social día tras día y algunos compañeros caen en la trampa y comienzan discusiones "vicentinas" sobre la "derechización" y la "Vaticanodependencia" del Gobierno. Mientras ese mismo gobierno designa un Ministro de Economía "marxista". Me pregunto; ¿esos compañeros entienden algo de política? Yo tampoco, pero trato como decía Jauretche de ser un "zonzo avivado"....
2 comentarios:
¿Que tendrá que ver un monarca teocratico en un Estado europeo con la democracia y la política?
Mas democracia, significa mas separación de La Iglesia de el Estado.
Es un buen verso... pero no deja de serlo.
Hablamos y luchamos por la democracia, por un Estado gobernado por politicos que nosotros elegimos, y terminar bancandole los trapos a un rey de un estado europeo al que nadie eligió solo para que su corporación religiosa se haga mas fuerte a costa de nuestro Estado.
Recuerdo a Nestor diciendo que había que terminar con los oscurantismos... y ahora esto...
Muy patético todo...
"y terminar bancándole los trapos a un rey de un estado europeo al que nadie eligió solo para que su corporación religiosa se haga mas fuerte a costa de nuestro Estado".
ESTE PIBE SE FUE AL CARAJO.
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