Dorrego sin conductores

El radicalismo gobernante en el pueblo viene sufriendo un par de cuestiones que lo desgastan y que lo hacen actuar sin previsión. Ya lo dije acá, nuestro Intendente es radical, pero labura en muy buena sintonía con la Provincia y la Nación, y no se ha sumado al discurso antiK fácil al que sí lo han hecho muchos compañeros (?). Sin embargo no pareciera ser hoy el conductor de su partido y sus correlifionarios. A los problemas de políticas de salud pública en la vecina Oriente y a la indefinición en un posible caso de mala praxis se suma la mala suerte de un funcionario sumado a un hecho delarruista como es no tener asegurados contra robo vehículos municipales. En fin. Se evidencia entonces que la conducción no es clara, que se podrá liderar, pero del liderazgo a la conducción hay varios km de distancia. Digo esto porque las respuestas del gobierno municipal a estas situaciones no son contundentes, se desparraman casi. El viejo conductor radical local, Osvaldo Crego (doctor también) parece haber dejado en manos de los jóvenes las riendas de la estancia, y son muchos pa' decidir. De yapa viejos dirigentes radicales con experiencia han sido ladeados o han abandonado las filas del radicalismo por esto de ver su bandera política más en el FPV que en el panrradicalismo.

Por casa no andamos tan distintos, a la dificultad del peronismo de ser históricamente gobierno (sólo en el menemato con la significación que eso conlleva), se suma la división que provocó el populismo kirchneristas, que ha logrado que el distrito aporte un diputado provincial, Jorge Srodek, en representación por CARBAP de la mano del peronismo denarvaísta (?), y que también confluyan en esa línea peronista opositora felipistas, atanasofistas y viejos dirigentes que se sumaron al discurso mediático provocado por la 125 y que hoy tímidamente pretenden hacerse los desentendidos. Todo bien, somos compañeros de todas maneras(!). Lo extraño es que el peronismo hoy es representado en el concejo deliberante casi por compañeros jóvenes que no son dirigentes o militantes clásicos, y si sumamos a los concejales del PRO peronismo, también.

Ambos partidos, está claro, y duele decirlo por los compañeros sobre todo, carecen de conducción. Falta de cuadros, falta de compromiso, tal vez signos de un tiempo de personas que se le animan a la militancia por afuera de las estructuras tradicionales, que confluyen de ideologías cercanas a la izquierda y hallan en el FPV su lugar pero que no encuentran quien los encauce, los organice, a quien responderle.

Claro que el tiempo político que por suerte nos toca vivir y construir, necesita de cuadros políticos sí o sí. Hasta el 2003 era todo lo contrario. El asesinato de cuadros en los 70 fue el asesinato de los maestros, y la necesidad de formar cuadros se hace evidente para sostener nuestro proyecto nacional y popular, máxime cuando los jóvenes han redescubierto la acción política más allá de las paredes de las universidades. El GESTAR y otros tantos programas son fundamentales, pero no alcanzan. Los pueblos necesitan cuadros formados desde los pueblos y sus realidades, amén de sus aptitudes innatas y de sus horas de lecturas y militancia. Sin embargo esa es una ambición muy grande cuando hasta carecemos de buena cantidad de militantes consustanciados con la causa. Por eso hoy la prioridad es la formación de militantes de base que encuentren en la acción política el conpromiso de participación popular que citaba del cro. Néstor en el post anterior.

Teléfono Cro. Antonio!