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| je, y luego nos alarmamos de la violencia en las instituciones educativas, como si fuesen hechos aislados |
La cuestión es que el jardín de infantes Tribilin, ahora sabemos, habilitado por el municipio, por lo que entonces está avalado por la Dirección General de Escuelas, no es otra cosa que una muestra de lo que a educación pública en la provincia se refiere. La anterior directora, Girvtz, pudo haber tenido muy buenas intenciones, pero con eso no basta. Mirémoslo a Lugo sino. Lentamente y sin pausa, la educación pública provincial se corre de la gestión estatal a la privada, nada se ha hecho en estos último años para impedir esa tendencia, donde los medios han contribuido bastante. Y con una particularidad, gestión privada subsidiada por el estado, que se ahorra igual mucha guita en sueldos y "gastos" de mantenimiento y logística.
De todas maneras quería referirme puntualmente al caso del jardín de San Isidro. En dos cuestiones: el sentido de la oportunidad de los medios, que aún sin ningún tipo de resultado de la evaluación de las pruebas por parte de la justicia (modus operandi que ya podría caracterizarlos en wikipedia), construye y machaca el estado de violencia que supuestamente se vivía dentro de la institución, justo cuando se comienzan a discutir las paritarias a nivel provincial. Y por último, enarbolarse como justicieros de una sociedad, la mediatizada digo, que lejos de creer en la justicia (que bastante hace a veces), prefiere la venganza, y si es por mano propia mejor. La casa de una de las imputadas ya fue apedreada, tal vez en un par de días saqueada. La maestra, ya fue juzgada y declarada culpable, aunque para la justicia todavía sea inocente. La justicia. La crisis en la justicia se evidencia también en que de ninguna manera los televidentes aceptarán un fallo contrario al que los medios de operación ya dictaminaron. Ya es cosa juzgada.
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