domingo, 24 de abril de 2011
Cantidad y calidad (Quinta parte, a modo de corolario)
Por
Unknown
Por el cro. Antonio
Hemos venido planteando algunas de las cosas que a mi criterio se pueden revisar al mismo tiempo que se organiza una intervención del Estado en una materia tan sensible como el comercio y producción de granos y oleaginosas, tanto que hace a cuestiones de Soberanía Nacional, como a la defensa de las fronteras, o la Navegación y explotación de nuestros recursos Marítimos.
Plantear la reconstitución de una Junta Nacional de Granos tal como era, es descabellado, y hemos intentado demostrar a través de algunas pautas sobre la producción triguera, que aquellos parámetros de comercialización por volumen y no por calidad causaron una distorsión el la producción a tal punto que el premio era por producir mucho y no por producir bien.
Todo está destruido, y su destrucción no significó beneficio alguno más que para los de siempre. Que la Junta tuviera 10.000 empleados y ahora no tenga ninguno, no trajo ni trae ningún beneficio a los chacareros. Es más; casi me atrevería a decir que (groseramente) nuestros chacareros se quedaron sin 40.000 clientes/consumidores de sus productos.
Así como el "beneficio" económico de las privatizaciones de los 90 no supera el monto monetario de una cosecha, los presuntos beneficios para los productores fueron solo un espejismo o la habilidad del "esparo" que los distrajo en el colectivo, mientras el punga se alzaba con la billetera.
Todo cuanto dije sobre el trigo y la harina es el ejemplo aplicable al resto de la producción granaria; sólo que por una cuestión profesional y laboral es el terreno en que se desarrolló mi vida durante 40 años, en los que a pesar de mis gallegos ancestros, a fuerza de repetición aprendí algunas cosas. Una de ellas: trato de hablar de lo que sé, y de lo que no sé escucho y averiguo.
Al plantearnos el Deber Patriótico de la Remediación de tantos males debemos ser realistas, y por ahí computar el beneficio que hayan destruido tanto. Sobre terreno limpio se puede construir mejor. Suprimir la presencia del estado dejó mas problemas que los que había y no solucionó ninguno de los preexistentes.
Lo mismo podemos decir de los Ferrocarriles. No se qué de lo que había merecía ser rescatado. El trasporte de pasajeros a larga distancia es una de esas cosas. Pero debemos ser conscientes que no traerá mágicamente el resurgimiento de los pueblos del interior. Vuelvo a repetir lo que dije aca en "De poblados y estaciones". Cuando el ultimo tren pasó nadie quedaba para verlo; ya todos se habían ido por falta de trabajo, de oportunidades, de una vida mejor. Si los encontraron donde estén no lo sé. Pero como quiera que sea, sólo volverán si en esos pueblos hay trabajo, o posibilidad de conseguirlo.
La fitogenética en un país agrario es a mi criterio algo tan de interés a la Defensa Nacional como la producción Petrolera o la Siderurgia lo fueron para los generales Mosconi y Savio, y ese es un terreno en el cual algún día tendrán que rendir cuentas algunos Traidores a la Patria. Quienes abrieron la investigaciones del INTA a conocimiento de las multinacionales semilleras tienen nombre y apellido: Huergo y Solá y algún día habrá que pasar la factura correpondiente, tal como si hubieran develado secretos militares que hacen a nuestra Defensa Nacional. Son cuestiones perfectamente asimilables.
La agricultura de la Pampa Húmeda se ha transformado para siempre, y con ella el llamado "sujeto agrario". Esto en si, no es ni bueno ni malo. Es así nomás.
Todo esto lo debemos pensar y repensar sin tabúes ni dogmatismos. Pero tenemos una ventaja extra, ya sabemos que algunas cosas NUNCA MAS.
--
Antonio (el Mayolero)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
post ideal para ruculeros...
excelente serie compañero
El desarrollo industrial y petrolero fue impulsado por "La Hipótesis de Conflicto",es decir,en caso de guerra,no depender de insumos e industria extranjera.
Al menos así nos explicaron a los alumnos de la ex E.N.E.T. # 4 general Manuel Nicolás Savio.
Agrego a lo que dijo Moscón, que el General desarrolló la industria pesada en detrimento de la liviana basándose en la posibilidad de una tercera guerra mundial.
10.000 tipos? Que barbaridad!
Publicar un comentario