La Parcelación del Poder

Por el Cro. Antonio



A raiz de un intercambio de opiniones con el Coronel por línea privada saltó la inquietud de bucear un poco en lo que podemos llamar provisoriamente la "parcelación" del Poder.

Hace bastante tiempo ya, y hablando de la ley 1420 en aquellos posteos de "Legislar y Ejecutar" vimos como la Iglesia Católica se había reservado el poder de veto sobre el Ministerio de Educación, a tal punto que fue una de las transgresiones fundacionales de Nestor Kirchner designar como Ministro de Educación a Daniel Filmus. Contábamos entonces que tradicionalmente TODOS los Presidentes consultaban al Episcopado el nombre del Ministro, y este funcionario se "consensuaba" con esta institución respetable en lo espiritual por la grey católica, pero totalmente fuera de los mecanismos constitucionales de una República que contiene en su ciudadanía los mas distintos credos religiosos, y también una respetable proporción de ciudadanos a los que les resulta absolutamente indiferente toda creencia religiosa, y sin embargo son buenos vecinos, trabajadores, sensibles a inquietudes sociales, buenos padres y tiernos abuelos.

Igualmente se fueron creando distintas parcelas de poder. Que se manifiesta en distintas expresiones, hasta estéticas y edilicias.

La importancia arquitectónica del edificio del Ministerio de Agricultura y Ganadería en Paseo Colón, o del Palacio Pizzurno, sede de Educación, contrasta con la inexistencia de un Ministerio de Salud Pública que recién aparece en la Constitución de 1949.

Lo que se dijo con respecto a Educación, tambien vale para Agricultura y Ganadería, donde la Sociedad Rural Argentina era la encargada de "visar" al Ministro que así en los hechos se transformaba en un delegado de los intereses "delcampo" ante el Gobierno y nó a la inversa, que es como debe ser, el transmisor de las políticas del Estado hacia el sector. A veces cuando las bases agrarias se inquietaban, la misma SRA promocionaba al cargo a alguien con mas llegada a los sectores díscolos para descomprimir la situación. Así vimos a un presidente de la FAA en el cargo, precisamente en la dictadura de Lanusse, cuando Ligas Agrarias tenía un crecimiento exponencial a expensas de los cuadros juveniles (y no tanto) del Cooperativismo Agrario.

De 1955 hasta 2003, el Ministerio de Economía cobró una preeminencia absoluta sobre todo el aparato del Estado, hasta llegar al absurdo Republicano de que era mas importante saber quien era el Ministro que el Presidente de la Nación. Así un funcionario, Secretario de Estado, dependiente funcional de la Presidencia de la Nación, que no era sometido a la votación de la ciudadanía ostentaba un poder que no le correspondía.

Nótese que los Gobiernos Militares ponían a sus pares de las FFAA en distintos Ministerios, menos en tres. Economía, Educación, y Agricultura. Esos siempre eran civiles, y en realidad, los grandes titiriteros.

Los intentos de los Presidentes democráticos por salir de esta lógica enfermiza y enfermante eran rápidamente abortados con dos o tres tapas de diarios paralelas a algun golpe de mercado. O de última algún golpe de estado (o conato). Así como los Radicales siempre recuerdan las huelgas de Ubaldini, también deberíamos recordar los "planteos militares" al Gobierno de Frondizi.

Y aquí es donde se debe volver sobre el asunto fundamental ¿El que Gobierna tiene el Poder? ¿O tiene sólo una parcela formal y representativa con una frontera móvil extra-Constitucional?

Ya venimos experimentando las reacciones de los distintos sectores de "okupas" del poder que han alambrado sus parcelas y lo que cuesta levantar esos alambrados para que el pueblo a través de sus representantes ejerza el Gobierno (y el Poder), simplemente como lo dice la Constitución Nacional. Que no es "cascara ' e papa", como dice mi amigo Alberto Sierra.

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Antonio (el Mayolero)