Posteo algo que encontré....

Aclaro de entrada que no es mio; El autor se llama Gustavo Antonio Gonzalez, y esto lo encontré en facebook. Como lo comparto en todas y cada una de sus afirmaciones, lo traigo para acá, para sacarlo de lo efímero del face, y que quede mas registrado.
Sale sin foto ni nada que lo ilustre visualmente.



Bien... entramos en la recta final de tu famoso "8N". No me parece muy válido abrir el pico con los números puestos. La cosa es tomar el riesgo y opinar antes. Después los hechos dirán si uno es un papanatas o entendió a priori cómo son las cosas. Tendrás tu 8N. Y sin ánimo de hacerme el profeta me gustaría exponer algunas certezas que tengo. La primera, es que -como muy certeramente lo dijera Clarín- "No va a pasar nada". Por supuesto Clarín dice esto del 7D, yo lo digo del 8N. Entiéndase bien. No estoy siendo despectivo. Sé que tanto esforzado bloguero en las redes sociales, tanto discurso de "ya no más dictadura", tanta publicación espúrea en los medios hegemónicos, centralizados en una fecha específica, lograrán sin duda una concurrencia multitudinaria. Desde ya les comento la foto: Van a destacar los carteles con agravios a la figura presidencial. Y aunque no lo crean, será lo que más debilite cualquier reclamo. El segundo gran error serán las caras visibles que ya puedo imaginar, Lanata, Bullrich, Carrió, etc. Habrá pancartas que hablen de dictadura, de inseguridad, (la jurídica y la otra), del derecho a comprar dólares para blanquear capitales generados en negro, y lo realmente hilarante será que también habrá acusaciones en el sentido que no hay libertad de expresión. No he visto en el mundo, desde que nací, los vituperios y bajezas que se han proferido contra CFK ni siquiera contra Hitler o Mussolini, o Clinton & Bush.. si de verdaderos asesinos se trata. Es razonable, cuando atacas un asesino es probable que te pase a deguello. Por ahí la cosa es que saben que CFK no mata enemigos... los ubica en su lugar. Ahora te cuento un secreto que ya deberías saber. Lo que no pueden es parar la rotación de la Tierra sobre su eje. No pueden apagar el sol, lo cual, traducido en criollo, significa que habrá un día después. Nuestro 9N. Sí. Tal como lees. Un 9N que se vino callado. Sin convocatoria, sin gritos ni histeria ni puteadas. Pero tan real como tu 8N. Es el día después. También te cuento la foto. Casi puedo ver la tapa de los diarios maldiciendo el poco espacio de la primera plana para poner imágenes donde se vea claramente que "el país" participó del reclamo, de la marcha, de la protesta, o del intento desestabilizador, como quieras llamarlo. Tapa de los diarios donde no vas a leer "Renunció CFK", ni vas a ver helicópteros sobre la rosada a la vieja usanza. No vas a ver tampoco fotos de tanques en la calle. Ni de policías reprimiendo. No vas a encontrar los muertos que buscabas. Por que apenas termines tu café y cierres el diario, vas a ver por la vidriera del bar la argentina real. Gente que camina presurosa al laburo. Pibes que van al cole. Gente que vuelve del almacén y ni enterada de tu marcha del 8N por que tiene cosas más importantes que entender tu ideología del odio, o tu alianza con las corporaciones que siempre quisieron nuestra patria humillada. Vas a ver gente que sigue escribiendo canciones, que hace teatro, que pinta cuadros, que hornea pan, que maneja un taxi, o lava los pisos en la casa de una familia que ahora debe pagarle su salario en blanco. Si bien es cierto que muchos de ellos también estarán desparramando su currículum por todos lados, al menos ahora lo hacen con esperanza. Vas a ver pibes que ahora pueden votar. Pibes que no necesitan tu famosa "Ley penal juvenil", sino ser parte de un todo. Debiste creer antes en ellos. Me temo que ahora es tarde. Ya son ciudadanos de pleno derecho. Y juro que los vas a respetar. Un consejo... despegate. Sí... vos... el que tiene un reclamo que puede ser legítimo. Despegate de los que trabajan para el enemigo. Peleá tu pelea, no la de ellos. Sólo así te darás cuenta que la "soberbia" presidencial no es para vos, nunca lo fue. Pero así te lo hicieron creer. Por otra parte, y cuidadoso del idioma como soy, diría que no es soberbia, es firmeza y convicción de estar haciendo lo correcto. Te saludo ahora, cacerolera/o... en paz y sin odiarte. Cómo podría ?... vivo en el país que quiero, con el gobierno que quiero, con los hijos que quiero y los amigos que quiero. Sería patético dejar de ser feliz.