Enredados en las redes

Hace un tiempo que he empezado a hacer un seguimiento de alguna red social, específicamente de facebook. Sin pretender ni siquiera aproximarme a la cientifica rigurosidad ingenieril de Adan de Ucea al desculatar los twitts, ni a la ponderable disección de los cacerolos del Pibe Peronista, "peinar" un poco el face resulta interesante. Generalmente en el face uno tiene trato con amigos o conocidos con los que hay ciertos códigos entendidos por ambas partes. Y las discusiones tienen un devenir mas o menos entendido. Cada uno sabe hasta donde puede "chucear" o chicanear al otro. Pero como la red está abierta, se empiezan a anotar en la discusión, tipos/as a quien uno de los dos no conoce, y que la "copan". Muy pocas veces surge algo interesante de esas intervenciones.

Por otra parte, uno ve circular (y aqui en el sentido geometrico de la palabra) como si fuera en una calesita temas que parecieron agotados en un tiempo y que algún esclarecido descubre como si fueran una novedad.

Temas que fueron hace seis meses refutados debidamente, aparecen como novedades, tal como si fueran el tema del dia. A veces uno los deja pasar, pero hay momentos en que comprobar que la estupidez es recurrente realmente desmoraliza. Y la ausencia de una oposición que genere temas que merezcan discusión mas o menos seria, es evidente. Hay mucha gente en las redes que está necesitando temas de profundidad, aunque hay momentos que dudo que haya muchos que sean capaces de leer y comprender mas de dos líneas.

Jorge Lanata les dió letra por una semana y media, y ante la declinación del tema  no lo pueden seguir sosteniendo. Íntimamente saben que les mintió. Saben que su investigación es tan trucha como los testigos que presentó. El tema Lorenzino los ocupó un par de dias, y ante la difusión del video completo y la explicación detallada de los cortes y ediciones, se pinchó el tema. Ahora les han hecho descubrir una fábula tan descabellada sobre la muerte de Nestor Kirchner, con testigos de identidad reservada (cuando no) y fuentes inobjetables de probada veracidad y rigor periodístico como OPI Santa Cruz o SEPRIN, que realmente son una ofensa a la inteligencia humana.

Y a medida que el cronograma electoral los vaya enfrentando a la dura realidad, que no tendrán candidatos para votar, que sus proclamas de republicanismo y apelaciones al respeto por "los que piensan diferente" no tendrán mas canalización que la que Moyano, Venegas o Barrionuevo les propongan, mas dispuestos a creer y difundir todo tipo de insensatez estarán.

No vaya a creer que es todo así; son pocos pero pesados.... Eso si hay grupos dentro del face que valen la pena, donde se dan buenas discusiones e interesantes polémicas, pero con una característica fundamental; somos todos del campo nacional  y popular. Lamentablemente no existe posibilidad de discusión con otras vertientes, ya que solo pueden apelar a la descalificación. No les he podido encontrar mas que eso. Lo lamento, y no creo ser el único que lo lamente.